18.11.10

México profundo más lento y más furioso



El antropólogo Guillermo Bonfil Batalla dice que gran parte de nuestra violencia la dejaron consolidada los españoles, no niega la anterior de los aztecas y mayas, pero dice que esta violencia – la que hoy transitamos- se impuso con las armas de fuego, caballos, armaduras, cascos, espadas, lanzas de hierro, perros de ataque y tácticas guerreras, que definen la superioridad de los españoles contra los indios; siendo un argumento de la dominación (la violencia pues).

Pero agrega que uno de los principales rubros que perfilaron al sistema de control cultural establecido se dio a través del pago de tributos:

“se presenta cuando las ciudades conquistadas y vencidas se obligaban a producir más y consumir menos para pagar el tributo que les había asignado, lo anterior daba como resultado el empobrecimiento de la población, sujeta a un incremento de la producción para obtener el tributo suficiente”

Evidentemente hay más mecanismos dentro del sistema de control, pero para efectos del presente texto, cito éste especialmente.

Partiendo de la expresión del primer comisionado para la paz en Chiapas, que recientemente comunicara a sus lectores su preocupación sobre la violencia nacional y sus efectos. Dice don Manuel Camacho con razón y sin mucho ejercicio reflexivo (es demasiado obvio), que: “la imagen de nuestro país en el exterior se ha deteriorado. En los foros internacionales, los medios, las cancillerías y las oficinas de negocios, se mira con preocupación el debilitamiento del liderazgo de México. Se pregunta: ¿por qué no han crecido más si han tenido petróleo y un acceso privilegiado al mercado de Norteamérica? ¿Qué tanto se prolongará o agravará la violencia?”

tal parece que nuestro país está lidiando un conflicto que es reconocible desde la perspectiva de la conquista, pero que con factores nuevos, adquiere una noción de novedad. Es decir, hemos sido siempre violentos por hartas causas, pero ahora nos asustamos de nosotros mismos. y lo que pudo haber empezado por un problema de percepción, hoy es algo más profundo. Se empieza a dudar sobre la capacidad de resolver exitosamente los problemas que se encaran. Y Sigue la burra: “El debilitamiento de la imagen está empezando a tener consecuencias adversas” dice don Manuel que gusta mucho de decir obviedades.

Recupera entre sus ocurrencias que: turistas que cancelan viajes a México; que las inversiones son revisadas adicionalmente cuando el destino es México, termina diciendo, en otra más de sus indiscutibles verdades:

“El deterioro afecta al gobierno, pero termina perjudicando a muchos otros. Es un problema cuya solución no debería esperar, pues avanza con rapidez y después será más difícil de revertir”.

No dejan de asombrarme las verdades tan obvias que plantea este hombre de estado y cuyo factor de poder es importante en el sendero que transita la política de México. Solo pienso. Si así reflexiona este protomacho de la política y hace publicar sus predecibles puntos de vista en diversos medios nacionales, hombre, pues ¿en qué manos estamos? ¿Hasta dónde nos ha lleváo el vendaval?

Lo cierto es que debería haber ya una estrategia para recuperar el liderazgo de México y, por lo pronto, para detener el deterioro de la imagen. Ciertamente se expresa fácil la cuestión, pero eso no deviene de un ejercicio de inteligencia muy profundo. Decir lo que obvia es hasta chocante. Lo extraordinario es que habiendo capacidad de retomar el rumbo nacional, éste se tropieza con trincheras impuestas por los políticos que se han inventado una gama multicolor de Partidos y cuyo único fin es tener poder, y para ello no tienen empacho en luchar por éste, con harta lana e inteligencia. Pasándose por alto, el sentido formal de la política – hacer que la mayoría progrese – y valiéndoles sorbete lo que suceda con la ciudadanía. La lucha es para permanecer o acceder – que no accesar como dicen los pendejos – al poder público.

Si abrimos nuestro panorama a los resultados de sesudos análisis que se realizan al interior de la UNAM, ITAM, y el CIDE, por decir unos, estos expresan mediante diagnóstico científico, cual debería ser la ruta del país y partiendo de ahí deberíamos trazar nuestro plan de vuelo con la concurrencia de políticos y científicos. De hacerlo podríamos recuperar no solo el lustre de nuestros liderazgo latinoamericano, sino, especialmente, la confianza en nosotros mismos y por ende en nuestro gobierno.

Hoy retomo las sandeces del coordinador del Diálogo para la reconstrucción de México (DIA) porque me hartó. Me parece necio insistir en los problemas derivados de la guerra que comenzó Felipe Calderón. Me parece ofensivo que él y muchos tunantes crean que no nos damos cuenta de la adversidad generada por este evento. Y más ofensivo es que tanto él, como muchos de su misma subespecie, no hagan más que leña del árbol caído y como auténticos candiles de la calle, hagan juicio moralinos que no abonan en nada. Necios y soberbios.

¿Por qué no van con ánimo de diálogo a decirle a Felipe: hagamos esto o aquello? No, en su lugar prefieren insistir en los errores y procurarse prosélitos para el 2012. Prefieren lucir como preocupados en lugar de ocuparse. Prefieren conservar sus prebendas y canonjías, a subirse las mangas y agarrar las herramientas que contribuyan a que este país mejore. Necios insolentes.



Abiertamente la sucesión ha comenzado, desde Comitán


Con un amplio presupuesto, Comitán le ha perdido respeto a las formas y ha roto la tradición de contención ante la sucesión del gobierno estatal. Con un evento de miles de acarreados, con la presencia de decenas de presidentes municipales en funciones y electos; de legisladores electos y en funciones, que quieren curarse en salud ante el virtual gobernador chiapaneco, haciendo a un lado sus temores ante la furia de Nemesio Ponce o Mauricio Perkins, quienes comparten con el gobernador en partes iguales, el gobierno de Chiapas.

Sin obviar las formas, el senador que ahora luce rojo en sus espectaculares con el ánimo de abatir el apodo de la cuija, dijo con énfasis que: “el estado de Chiapas ha realizado la obra de gobierno más amplia y ambiciosa de su historia. Reconoció la gran labor que ha realizado Juan Sabines al frente del gobierno de la entidad, al gozar los chiapanecos de un ambiente de tranquilidad y paz, al impulsar la primera ciudad rural sustentable del mundo, pero sobre todo, dijo el inteligente senador “al colocar a Chiapas como ejemplo nacional de lucha contra la pobreza, incluyendo los Objetivos de Desarrollo del Milenio en la Constitución Local”


Velasco Coello destacó que una de sus prioridades en materia legislativa han sido las mujeres, por lo que señaló que seguirá trabajando a fin de que se apruebe una Ley de pensiones a fin de que las madres solteras reciban un apoyo económico para la educación de sus hijos y las reformas en torno a la igualdad entre mujeres y hombres a fin de impedir que las mujeres reciban un salario inferior al de los hombres. Bien por el Senador.

Así mismo, el jovencísimo político chiapaneco se refirió de manera particular a los jóvenes, de quienes aseguró “deben ser la prioridad de todos los gobiernos y de todos los legisladores, por lo que hago un llamado a la cámara de diputados - y volteó a ver hacia la casa de su suplente, Albores Gleason - para aprobar las reformas a la ley federal para prevenir y eliminar la discriminación, a fin de que no se exija a los jóvenes experiencia laboral para su primer empleo.

Manuel Velasco se comprometió a trabajar por el medio ambiente, por los niños mexicanos combatiendo especialmente la obesidad, así como por la gente discapacitada, por lo que informó a los presentes que han sido elevadas a rango de ley, reformas a la Ley de Cultura Física y deporte, a fin de que “las personas con capacidades diferentes, tengan los estímulos económicos que merecen para practicar deporte” afirmó.


Ausentes en el arranque de campaña

Finalmente, el lozano Velasco Coello convocó a todos los sectores de la sociedad a conformar un gran acuerdo nacional, a fin de acordar entre todos un nuevo rumbo para la nación; reconoció que México no ha podido avanzar en las reformas estructurales que necesita el país para salir adelante, (¿porque será?) y remató diciendo “¡la gente no quiere pleitos, quiere acuerdos! y estamos obligados a superar las diferencias para aprobar los cambios urgentes que demanda la población como son las reformas laboral, energética, de seguridad, educativa, pero sobre todo una reforma que ayude a reactivar el campo”. Ve pues. Listo el chamaco.

Los ausentes. Su diputado de distrito, Robertito y los senadores por Chiapas María Elena Orantes y Rubén Velázquez (¿Quién?), los primeros, seguro porque son fuertes contrincantes del senador güerito y el tercero, no importa. Lo que sí preocupa es que Eduardo Ramírez que ha hecho bien la tarea, ahora le indique a los medios locales que le peguen a María Elena Orantes y al gober, en un afán de demostrar lealtad, pero que le puede costar caro a su jefe. Cosas veredes Sancho panza. Cosas veredes.

11.11.10

Chiapanecos sumisos

Alvin Toffler futurista y analista formal del último gran salto del conocimiento humano, en su libro más emblemático EL shock del futuro, recoge en su capítulo sobre las nuevas divisiones cronológicas de la sociedad moderna, un precedente africano que guardada las proporciones, retrata en mucho a la sociedad moderna urbana y suburbana chiapaneca.

Dice más a menos así: los viejos de una tribu africana, que han perdido preeminencia en el liderazgo de su pueblo por la presencia de muchos más jóvenes, que en alarde de vigor y violencia ahora imponen sus decisiones, consigue que ahora los viejos “acepten” como una seña de cooperación, cualquier determinación, sin importar lo loca que pueda ser ésta.

Sin embargo Toffler recupera el criterio del antropólogo que remite la historia:



La aceptación en seña de cooperación acusa más bien la sumisión ante una entidad de poder.



Chiapas hoy en día está gobernado por un triunvirato de jóvenes (trinca me dijo un joven sabio) y de esa tercia, dos terceras partes no son chiapanecos, son patanes, nacos y lo peor tienen poder absoluto.


De ese tercio, dos terceras partes no tienen la legitimidad del mandato popular. Es decir, nadie votó por ellos. Tampoco la ley los dota de prerrogativas para decidir sobre contratistas, sobre negocios económicos con el erario público. Como tampoco para – aún con usos y costumbres- palomear candidatos, inscribir la lista negra del gobierno y decidir quienes integran la lista de beneficiados con la chuleta de “gobernabilidad” (perdón la Partida).



De esa triada sin arraigo chiapaneco, pero especialmente de las dos terceras partes citadas depende la vida política de los políticos. No es una perogrullada. Los políticos en Chiapas tienen que notificarles hasta que horas calculan vaciar sus intestinos, así como si salen de Chiapas o regresan, o con quien van a reunirse, tal como sucede con la gestapo. De no hacerlo, de no avisarle a este par especialmente, ello confabularán contra él pobre político y lo mandarán al ostracismo o peor aún al bote (con previo paso por el pitiquito).



Esta junta trinitaria está constituida como el gobierno supremo de Chiapas, de jóvenes vigorosos, arbitrarios, irreflexivos, veleidosos y que han provocado temor en la clase política actual. Las dos terceras partes son Nemecio Ponce y Mauricio Perkins.



Las dos terceras partes se irán de Chiapas al término del gobierno de Juan Sabines (esperemos) o después, pero irremediablemente se irán, porque no es esta tierra la que los atrae ontológicamente. Están acá por negocios porque ahora ejercen un poder que sólo en Chiapas y solo en este gobierno, lo pudieron haber ejercido. La concurrencia de tantos factores permitieron su presencia en la vida chiapaneca, pero esa concurrencia, fenece y fenece pronto.



El asunto no son ellos. Ellos son malagradecidos y patanes. El asunto somos nosotros. Nos hemos dejado convencer por poderosos sin un argumento veraz. Nos hemos dejado persuadir como unos crédulos. Y peor aún como crédulos hemos actuado contra nosotros mismos, estamos bajo las órdenes de este par infame. Somos escudos y aguerridos paladines para beneficio de sus deseos, como si estos fueran dogmas. Dejamos que ellos hagan de su Chiapas su hacienda, mientras nosotros “aceptamos” cooperar.



Pero no somos los únicos culpables (mmm… gran consuelo) el más poderoso de esa tríada ha torcido la realidad para convencernos,para decirnos que es por nuestro bien. Habemos incluso, quienes aún defendemos su inocencia, su buena voluntad, su valía.



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Los cachorros

El libro de Thomas Benjamin, Chiapas: tierra rica, pueblo pobre, insis­te en la perennidad de los finqueros ricos y del pueblo pobre más allá de las grandes convulsiones históricas. Empero, su propia investigación desmiente lo adecuado de un método únicamente enfocado en resaltar las continuidades. Hay quienes sostienen que la violencia ejercida por los revolucionarios de 1910 es de signo idéntico a la violencia de los gavilleros y bandidos que asolaron al país durante el siglo XIX.

Benjamin retoma el concepto para ubicar la larga duración chiapaneca en el afán de sus finqueros por construir, modernizar, expandir y mantener una fuerte agricultura comercial. Antonio García de León, otro estudioso de Chiapas, ubica a su vez como constante de su historia, la resistencia campesina. Pero remata Benjamin:

En un análisis final, la Revolución en Chiapas no fue sino un capítulo en el proceso histórico más amplio de modernización y reforma dirigidas por la élite.


Esa élite que desde que se subió al tren del gobierno revolucionario para mantener el control de las “masas populares” no se baja. Se mo­derniza, se reinventa pero que al final subsiste soterradamente jalando los hilos del poder público.

Chiapas mantiene ahora una descarada unción de cachorros y lo que es peor pretende continuarla, mientras lo ciudadanos seguimos escuchan­do hasta el cansancio lo bien que estamos, con el afán claro de que deje­mos de ver a nuestro alrededor que sigue igual de mal que hace un siglo.

Si bien ya no hay tienda de rayas ni los latigazos, los embutes a líderes, dueños de periódicos, periodistas y cualquier gato que represente una po­sible crítica es tan indigna como la tienda de raya y el acasillamiento. El cooptar a la población jodida con lana -aprovechándose de su pobreza e ignorancia- resulta tan dañina como el látigo y si ahora podemos vivir mejor, no es por los méritos de quienes detentan el poder, sino porque los ciudadanos están un tanto más asertivos en sus juicios.

9.11.10

Juan Sabines pasa de moda










El gobierno de Juan Sabines es un gobierno de moda. Carece de ejercicio intelectual responsable y sucumbe a las ocurrencias de las que parecen ser buenas ideas. Es capaz de cautivar y dejar absortos incluso a los más pintados, pero adolece de rigor y de responsabilidad y su destino es la impermanencia a largo plazo.



Muy distinto es el gobierno de su padre, el cual tampoco careció de ocurrencias pero fue en el fondo, un gobierno genuino. Un gobierno auténtico que respondía a una época de giros de timón rápidos y cuyo efecto positivo podía palparse con relativa rapidez. Me refiero al gobierno de Sabines Gutiérrez en tiempo presente porque en muchos lugares de Chiapas y especialmente de Tuxtla Gutiérrez se le recuerda con aprecio y se habla de Juan Sabines Gutiérrez, como si se hablara de un pariente.



Su integración con el estrato de la sociedad mas humilde; su espíritu amiguero que departía entre el cochito, el trago y la estancia de horas en lugares que era demandado, construyeron la imagen del amigo, del ente cercano. Su capacidad de escuchar al que opinaba distinto a él, le dieron al estado el oxígeno de un gobierno conducido por un padre, un hermano mayor.



Cuando alguien discrepaba, antes de despedirlo, de cercarlo con hielo, de arraigarlo o mandarlo a cárcel, se confrontaba con él defendiendo su postura. Manteniendo presente que el estado era gobernado temporalmente por él y no era su hacienda, ni su rancho. La mejor expresión de esta seña de gobierno se encuentra en la historia del aguerrido Germán Jiménez, que trajo a la capital a cinco mil campesinos (hay quienes dicen que 10 mil) para exigir un mejor trato para el campo. Luego de horas de discusión el gobernador Juan Sabines Gutiérrez salió al balcón y voz de grito dijo que todo se iba a resolver y que Germán era su amigo. Lo abrazó y selló su acuerdo. Nunca ha regresado a Chiapas una estampa de tanta transparencia.



De ese acuerdo emanó la traída de ingenieros agrónomos y forestales de varias partes del país y de la compra de miles de toneladas de hidrógeno para inyectar a la tierra chiapaneca y construir el éxito de la mazorca de oro, que se ganó por las altas producciones de maíz. De esa época subsisten acá, ingenieros forestales norteños que han hecho de Chiapas su hogar y que han contribuido formalmente a recuperar la cobertura forestal perdida y que notan gran diferencias entre el padre y el cachorro, al percibir como se modifican o inflan la cifras de reforestación, sin que el gobierno conozca o sepa a ciencia cierta, que está pasando con ese proceso o sí está fomentando un estado imaginario, en donde la reforestación va viento en popa.



Del deporte los ejemplos pueden parecer pequeños pero nadie cuestiona su existencia. Amigos del gobernador obsequiaron terrenos al viejo Juan con la condición de darle una utilidad pública general y el viejo con tres pesos y harta voluntad echó a andar el centro deportivo mas exitoso del estado, haciendo con el nombre una broma al donador filántropo: nombrarlo con su apodo: cañahueca. Hay una gran diferencia entre un espacio diseñado para la familia humilde al centro de adiestramiento de tenis con el nombre de su cuasi - ahijada Alexia Coutiño, cuyo éxitos a los 12 años, le parecieron suficiente al cachorro para homenajearla.



Priva una gran diferencia entre reedificar el palacio de gobierno y hacer una plaza cívica más amplia para la gente y también digámoslo, para sentir lo que sentía el duche Mussolini. Pero aún así solo por costos y beneficios no se puede compararse el remozamiento del corazón político de Chiapas, a celebrar contrato con inversionistas de oscura referencia, para decirles: vengan, hagan una torre en Chiapas y yo les garantizo que el gobierno de Chiapas la alquilará a precios tan atractivos que en menos de 7 años recuperen la inversión y se forren con lana pública.



Una torre que se ha vendido al pueblo de Chiapas como la solución para que todas las oficinas que paguen renta no la hagan y que solo con tres secretarías administrativas quedará hasta el tope, y permitirá que el último piso sea de uso exclusivo del gobernador, que, como un jeque petrolero dejará sublimarse en su delirio de esplendor, al mas puro estilo del tlatuhani.



Juan padre gobernó con amigos y con gente sensata y crítica, pero especialmente eran gente enamorada de su tierra y compartían el interés de que Chiapas creciera. Son proverbiales sus amistades; sus dejos de sultán, cuando encontraba a un humilde auténtico que le decía no estoy de acuerdo con lo que hace gobernador. No solo lo celebraba, lo cubría de lana y de apoyo. Le gustaba su pueblo y le gustaba que éste fuera libre y se sintiera libre. No le gustaba el sometimiento. Era bravo pero quería a la gente igual a él. Como asesor de José López Portillo, no suavizaba sus expresiones. Era duro ante el más poderoso y atento ante el más humilde, seña de su empoderamiento formal.



Juan hijo está condicionado por defeños y michoacanos, y a diferencia de su padre está rodeado de quienes, por no perderse de la teta celebran sus ocurrencias. No hay crítica, no hay términos medios para los extraños. Sino eres mi amigo incondicional (cómplices dicen los que saben) eres mi enemigo y cuídate del ostracismo con el que te he de rodear o con mis arraigos y la prisión. Si me convienes, aunque no seas mi amigo te forraré de lana para someterte a mi voluntad. Si me gustas te encumbraré. Si me aplaudes secretario serás. Pero cuida tu lengua, cuida tus pensamientos, cuídate de tus amigos que aborrezco y cuida especialmente tus críticas, porque pueden ser tu expiración pública. Cuídate de mi y mis veleidades.


Como el poder no es su fuerte, pretende demostrarlo con poses totalitarias y arbitrarias, incurriendo en aquellos que están por debajo de la línea del poder: los prepotentes.


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4.11.10

Don Juan se blinda ante la inminente huida.




El gobierno de Chiapas pagó un evento infame por su alto costo y cuya intención no termino por entender. Existe una conferencia de legisladores de todo el mundo que se reúnen para discernir los temas del mundo y de alguna suerte me parece afortunada la idea, pero eso no significa que por afortunada que sea ésta, hay que concretarla a como dé lugar.

Para el evento se convocaron a congresistas de casi todo el mundo y se les atendió como dignatarios de Estado. Habitaciones de lujo, autos blindados, nubes de gatos de director pá arriba, regalos carísimos, comidas con chefes famosos del DF y una parafernalia propia del retorno del hijo pródigo y como dirían los filósofos de Intocables… ¿y todo para que? ¿… todo para qué?...pues aunque usted no lo crea, pues para desapendejar a los futuros legisladores que de por sí, ni importancia le dieron los muy sabios.

El asunto es que la estrategia es mala desde el principio. Un gasto tan grande no se justifica y menos, para supuestamente aleccionar a legisladores que estarán como levanta dedos en una de las legislaturas más efímeras de los últimos 80 años. Tampoco se justifica como una suerte de curso intensivo para abrirles los ojos a quienes ya los tienen abiertos, pero que su subconsciente no les da para entender su papel como legisladores y parlamentarios chiapanecos, y especialmente piensan en medrar, hacer negocios y regodearse en vanidades y veleidades.

A mí la idea me parece más bien, ser una suerte de auto homenaje provocado por el gran aprecio que existe entre el gobernador el representante de la ONU en México, Magdy Martínez a quien, ya le regalemos una casa, es más barato dársela que traerlo cada rato con honores propios de un sultán.

Los eventos realizados a puerta cerrada en el poliforum estaban destinados sólo a legisladores estatales y secretarios de estado y aún no entiendo formalmente porque lo hicimos nosotros, los chiapanecos. Digo, no entiendo si el sentido era quitarles los mudo a nuestros mudos legisladores, esta acción encierra una triple lectura: a) si queremos quitarles lo mudo, ¿no sería más fácil dejarlos opinar libremente? b) si los aleccionamos con tanta información tan variada de mundos que no son este mundo ¿con ello se pretende dañarlos efectivamente de sus facultades mentales? Y finalmente c) ¿por qué no participaron nuestros galanes legisladores con alguna ponencia o pregunta? O acaso quieren honrar la máxima de groucho marx: prefiero quedar callado y parecer idiota a hablar y despejar las dudas definitivamente.
Pero, suponiendo sin conceder que ese era el fin, porqué no organizamos un curso de capacitación propio para ignorantes que realmente les despejaran las dudas a nuestros tiernos rapaces – lo digo en el sentido de niño, párvulo o chiquillo y no el sentido que estimo le está dando, cual si fuera un gavilán devorándonos como pollitos-. Para ello estoy seguro que el evento hubiera sido más barato y con mayor rentabilidad.

Beatriz Paredes y Perfidio Muñoz Ledo para empezar, y que dieron lustre de los legisladores mexicanos en este evento, podrían ser los mismo para capacitar los mozuelos: pero no olvide a Manlio Fabio Beltrones, Sami David, Pablo Gómez, Juan de Dios Castro, Emilio Chuayfet, Heladio Ramírez, Josefina Vázquez Mota, Rosario Green, Ricardo Monreal, Francisco Barrios, Arturo Núñez, Fernando Baeza, Pedro Joaquín Coldwell y hasta el patán de Carlos Navarrete. Sólo por decir unos.
SI la intención hubiera sido capacitar a nuestros servidores de primer nivel, ya sea representantes populares, ya sea secretarios de estado, pues hay mejores medios, pero evidentemente no era ese el fin.

Juan Sabines que no es un hombre muy leal que digamos, siente pasos en la azotea. Ve muy cerca el fin –bueno, y lo está – y busca conseguir abogados defensores que lo protejan cuando él no esté en el gobierno. El hecho de que en Comitán la prensa pagada por el alcalde esté dando al gobierno de Sabines -el chico- una calificación de fallido, deja ver que Manuel Velasco está reclamando ya su territorio. No olvidemos que el dueño del alcalde Eduardo Ramírez es el actual senador chiapaneco.

Hay quien sostiene que es su plataforma para acceder a la candidatura a la presidencia del país, pero, haciendo sumas y restas, no veo que partido serio – por decir algo- le pueda obsequiar la candidatura. En el PRI hay dos titanes que están armándose hasta los dientes para luchar por la candidatura y ahí nuestro gobernador no tiene estatura. EL PAN tiene mejores gallos y con amplia proyección nacional que Juan Sabines y en el PRD, Marcelo tratará de evitar que el PEJE lo alcance y lo que resta del chiquititero… uff… ya no importa. La cuestión es que yo no creo que haya estos alcances, incluso para Sabines y su equipo. Saben, sumando y restando que no les alcanza la plata y la fuerza, por tanto a mi me parece más un asunto de blindaje que otra cosa.

Bueno pues, con todo, el gobernador y su proverbial impuntualidad, llegó dos horas tarde a la clausura del acto celebrado en su tercer día en el congreso estatal. Como vaticinio para cuando quiera ayuda don Juan, después de haber incumplido a propios y extraños y de haber sido cómplice de Pablo Salazar, quien reservó mucho dinero inauditable del Stan para la campaña del cachorro, y que con la omisión – que más bien es pacto- del actual gobernante chiapaneco, el sátrapa mantiene su boato en Cancún y dispone entrada amplia para sugerir la sucesión.

Cosas veredes, Sancho

Bueno pues debo decirle que ni los legisladores electos llegaron, ni invitaron a la prensa, ni los secretarios estuvieron ahí y vaya fue como un diálogo de locos que nos costó un ojo de la cara. Corrijo: La secretaria del empoderamiento de la mujer si llegó. Estuvo 13 minutos de los cuales cinco y medio estuvo mandando mensajes en su Black Berry (Pineando dirían lo que saben) y luego se marchó.