19.6.09

Medio ambiente. Lugares comunes y falta de perspectiva

Ecología

La voz ecología está compuesta por las palabras griegas oikos (casa, vivienda, hogar) y logos (estudio o tratado), por ello Ecología significa "el estudio de los hogares" y del mejor modo de gestion de esos. Ecología es hoy la ciencia que estudia los seres vivos, su ambiente, distribución y abundancia, y cómo esas propiedades son afectadas por la interacción entre ellos. La visión integradora de la ecología plantea que es el estudio científico de los procesos que influencian la distribución y abundancia de los organismos, las interacciones y la transformación de los flujos de energía y materia. Esta voz fue introducida en 1869 por el prusiano alemán Ernst Heinrich Philipp August Haeckel (ernest haekel) en su trabajo Morfología General del Organismo. Este biologo y filósofo fue por cierto, uno de los que popularizó el trabajo de Charles Darwin.



Entonces, cuando la mayoría utiliza la voz ecológica, para describir las acciones de algún líder o político que levanta basura o pinta de verde algo, no solo está faltando al origen de esta voz, sino que confunde la actitud de preocupación por el medio ambiente, por algo tan profundo y complejo como es la interacción natural de los seres vivos en su habitat y los efectos de esas relaciones.


Educación ambiental

La Educación Ambiental no es una forma nueva de enseñar las ciencias naturales, al contrario, es un movimiento andragógico, es decir es una práctica o praxis que emana de los principios de participación social, en donde la todos por igual participan (horizontalidad). Esta nueva asignatura integra al conocimiento del ámbito ecológico, conocimientos filosóficos, políticos, económicos y sociológicos. Intenta por sí, modificar relaciones de producción, estructuras económico-sociales y patrones culturales, con el ánimo de construir un nuevo contexto histórico ambiental global.

Hasta ahora la educación ambiental en Chiapas, se ha enfocado con una visión reduccionista, y cuando mucho de descripción de la problemática ambiental. Pero como lo hemos expresado en artículos previos en este mismo Blog, el gran dilema de la educación ambiental actual, es que atiende lo urgente y no le alcanza el tiempo, en el mayor de los casos, para atender lo importante, que es, modificar las interacciones humanas, sus convenciones y las reglas del mercado global. Con ello alcanzaría su propósito.



Vaya, hoy la Educación Ambienta tiene como objeto de estudio a la naturaleza sin que esta sea intervenida por el quehacer humano (fotosíntesis, ciclos del agua o del carbono, cadenas alimentarías). Y aunque por oposición lógica, acuse los efectos negativos de la presencia humana, le falta a la EA una visión mas integral y más abierta, en el sentido de que el ambiente natural no es tal, cuando se observa sin los humanos.

Es decir no se debe hablar exclusivamente de la destrucción de las selvas tropicales, separándola de la pobreza y la distribución inequitativa de la riqueza en el mundo. Como dirían los expertos no se puede excluir de las ciencias naturales la educación ambiental, pero es necesario integrar correctamente ésta, con los actos y valores humanos en una visión que integre a todos, vertical, horizontal y transversalmente, es decir con una visión holística.

En la educación ambiental se debe integrar los procesos y características que científicos analizan al respecto de sus campos de conocimiento, pero no solo biologos o zoólogos, sino también filósofos, sociólogos, antropólogos, politólogos, expertos en educación, ciencias sociales, etc. Hablar de la Educación Ambiental desde una perspectiva biológica exclusivamente es darle, reitero, una visión reduccionista, cuya inutilidad tiene pruebas ya, en nuestro entorno académico y social.

Asi que, cuando le hablen de educación ambiental, no se permita pensar exclusivamente en el estudio de las ciencias naturales.

Los “nobles” plásticos biodegradables.

Comenzaremos por comprender que un biodegradable no es lo mismo que un degradable. Los plásticos degradables, oxidegradables y biodegradables se encuentran definidos en el estándar internacional ASTM D883-99 (http://mexico.ihs.com/collections/ASTM/astm-mexico-lp) como sigue:

Un plástico degradable, como en el caso de las bolsas del super, es un plástico que en su proceso de producción se le agrega un aditivo (importado, y muy caro) para acelerar su degradación. Con ello una desintegración tarda dos años aproximadamente, en vez de mas 100 años que tarda una bolsa promedio en deshacerse. Este plástico está diseñado para sufrir un cambios significativos en su estructura química acelerando la pérdida de algunas de sus propiedades.

Casi con el mismo principio y más económico, se creó la bolsa oxidegradable, que se desintegra por la acción de oxidación estimulada por un aditivo cuyo efecto básicamente es envejecer los elementos polímeros que componen a ésta. Con esta técnica aun no se calculan los efectos negativos.

Finalmente están los plásticos biodegradables, que consolidan co n caña de azúcar, fécula de maíz y bambú, y al igual que cualquier comida que tiramos a la basura se descompone. La degradación ocurre por efecto de la acción de micro-organismos existentes en la naturaleza tales como bacterias, hongos y algas. y por ser de materiales naturales, en 120 días se transforma en materia orgánica. Estos productos cuentan con el aval de organismos mundiales, como; SGS, FDA y GB National Testing, etc.(http://www.quiminet.com)

sin embargo debemos decir que estos plásticos que se desintegran constituyen para mucho expertos y organismos ambientalistas en el mundo, una nueva forma de contaminación. Porque si bien, éstos desaparecen del panorama visual, no así el transtorno químico en los demás elementos de la tierra y agua. No sabemos aún como nos alcanzará el efecto negativo de los elementos químicos que se utilizan para desaparecer a dichos plásticos.

Tiene además dos talones de Aquiles harto tramposos. El primero es que los plásticos que desaparecen de nuestra vista, no resuelven el conflicto de la contaminación, solo lo modifican a un plano más complejo. Pues los otros plásticos se ven mal, pero no contaminan agresivamente, y además reservan sustancias tóxicas que guardan. El segundo es que existe en México, más de medio millón de empleos generados a partir de la industria del reciclaje. ¿Que pasará con ellos?




Y para cerrar esta reflexión el problema de los plásticos que no se degradan es debido la falta de cultura del reciclaje, y si ahora nos relajamos por la sabiduría de que las bolsa y envases que nos lleguen se van a desintegrar, pues más se va a relajar el hábito de tirar todo en la calle, en el campo o en la carretera.

Así que, dígame usted...¿que será mejor?